Usamos el salón VIP y el FastPass de American Express en Ezeiza

En la nota anterior conté cómo hacer las reservas para los beneficios de salón VIP y FastPass de American Express en Ezeiza: AMEX Aeropuertos VIP. Si quieres saber cómo siguió la historia, quedate a leer los siguientes párrafos que contienen información valiosa sobre la experiencia de uso.

¿Recuerdas que en la nota anterior te contaba que AXA o Aeropuertos VIP debía aun enviarnos un mail con instrucciones para acceder al uso del Fast Pass y confirmarnos el cupo para hacer uso de ello?

Ese correo electrónico NUNCA llegó.

Así es que el día del vuelo, a mediados de mayo de 2024, llegamos al aeropuerto temprano para averiguar si podríamos usar tanto el beneficio del FastPass como el del salón VIP. Cabe aclarar que como teníamos tanto tarjeta AMEX como Visa Black, si fallaba el salón de la puerta 23 (Amex), teníamos la posibilidad de intentarlo en el salón de la puerta 1 (Visa).

Llegamos al aeropuerto alrededor de las 20 hs, y nuestro vuelo salía a las 23:55 hs. Pasamos primero por los mostradores del check in. No pudimos realizarlo previamente de forma online (te lo cuento en otra nota). Este trámite fue bastante ágil, y alrededor de las 20:30 hs llegamos al sector de entrada a las cintas de seguridad, donde deberíamos probar nuestra suerte con el FastPass.

El sector de FastPass de Ezeiza se encuentra al costado izquierdo de la entrada común a las cintas de seguridad, y tiene un gran cartel negro con el nombre. Por ello aunque no recibimos las instrucciones para llegar, era fácil encontrarlo.

En el ingreso, un hombre en un mostrador chequeaba las reservas de las personas. A la pareja que estaba delante nuestro la demoraron un poco porque no tenían hecha la reserva, lo cual nos preocupó. Pensamos que tendríamos el mismo problema por no haber recibido el mail de confirmación.

Pero al llegar nuestro turno, con solo brindarle al empleado el número de reserva, confirmó nuestros nombres y el uso de los 2 beneficios, dándonos la bienvenida al servicio.

El trámite fue realmente veloz. Estabamos casi solos y la gente delante nuestro pasaba rápido. Atravesamos el sector de la cinta de seguridad sin mayores problemas. Llegamos al área de Migraciones y notamos que también teníamos un área preferencial ahí. Son 3 cubículos de migraciones que se encuentran en la línea de camino del FastPass, apartados de los demás. La persona que nos recibió nos saludó con una sonrisa, miró nuestros pasaportes, nos sacó una foto, tomó una huella y adelante.

En aproximadamente 5 minutos entre el chequeo de reserva y la liberación de Migraciones, ya estábamos dentro, en el medio del free-shop. ¡Qué placer!

En este video podrás ver la experiencia con este servicio.

Una vez atravesado el sector anterior, lo primero que hicimos fue dirigirnos hacia la puerta 23 del aeropuerto, a fin de averiguar si podríamos usar el VIP.

Subimos una escalera que nos llevó a una recepción vidriada donde se lee American Express Ezeiza Lounge. Al llegar allí tuvimos que esperar unos minutos a que terminen de atender a otras personas.

Al atendernos, nos pidieron que escaneemos un código QR a la vista, el cual nos redirigía a un chat de wapp. Allí aparecía un link que redirigía a un formulario que debíamos completar con datos básicos para así quedar en la fila virtual. ¿Te cansaste al leer todas las vueltas para ponernos en lista de espera? Yo también.

Nombre, apellido, cuántas personas querían ingresar y un número de wapp donde avisar cuándo podríamos ingresar. Mientras lo completábamos, preguntamos qué demora había, a lo cual respondieron la cantidad de gente que había en espera antes que nosotros: 50. Era sábado, 21 hs, aeropuerto lleno de gente, hora pico…

Esperamos en unas sillas del aeropuerto. Todo fue ansiedad, porque no teníamos idea cuánto tiempo significaban esas 50 personas delante nuestro, eramos novatos en esto. El tiempo pareció congelarse.

A las 22 hs, exactamente una hora luego de registrarnos, nos llegó el mensaje avisándonos que podíamos ingresar. Al llegar nuevamente a la recepción solicitaron la tarjeta Amex Black con la cual haríamos uso de los beneficios. Tomaron los datos y nos invitaron a ingresar, no sin antes avisarnos que sólo podríamos hacer uso del salón durante un máximo de 4 hs. Obviamente por esa experiencia, la tarjeta descontó 2 pases más los 2 FastPass.

El salón VIP de Amex no me pareció muy VIP.

A ver, voy a explicarme. Por supuesto tiene más comodidades que el resto del aeropuerto y un servicio de comida y bebida espectacular, incluido dentro del acceso al salón. Pero observé dos cosas que me hacen sentir poco VIP:

1. El aeropuerto de Ezeiza está TAN bien remodelado y modernizado, que gran parte de las comodidades se pueden conseguir en el resto del aeropuerto. Por supuesto en este caso no siempre está garantizada su disponibilidad. Ejemplos de esto podrían ser conectores para dispositivos en varios lugares, asientos cómodos para esperar e incluso dormir una siesta, baños impecables, y hasta un sector destinado a quienes viajan con sus mascotas. Realmente me sorprendió lo hermoso que está luego de su remodelación.
2. El otro aspecto que me hizo sentir poco VIP es la larga espera que tuvimos para ingresar al salón y, por lo tanto, la gran cantidad de personas que había dentro del mismo al ingresar. Está claro que en los ultimos tiempos, al menos en Argentina, los bancos cambiaron las condiciones para ser cliente Black. Anteriormente era la categoría más alta que un cliente de banco podía tener, y por ende de difícil acceso. Actualmente se ofrece a mucha más gente, con condiciones más fáciles de cumplir. No me malinterpreten: es algo positivo que cada vez más personas tengan acceso a beneficios, de hecho nosotros somos de ese grupo. Pero no me termina de convencer el esfuerzo que para algunos de nosotros implica llegar a esa categoría, por los beneficios que ofrecen estas tarjetas.

Dicho todo esto, cuento en detalle con qué nos encontramos en el salón VIP de American Express en Ezeiza (aunque más abajo podrás verlo en video):

• Sillones y sillas muy cómodos para sentarse o incluso recostarse levemente. No hay sillones cama o muebles para dormir varias horas con comodidad.
• Mesas a diferentes niveles para comer o usar tu laptop.
• Sector TV, con sillones frente a una pantalla de TV gigante, y la opción de ver diferentes contenidos. Ese día había un partido de fútbol.
• Sector exclusivo de juego para niños en un salón aislado.
• Baños con todos los implementos necesarios (aunque no los encontré muy limpios, había papel higienico en el piso).
• Duchas disponibles solicitando acceso en recepción (no pude evaluarlas).
• Dos islas extensas y refrigeradas con diversos alimentos: de un lado encontramos insumos para desayunar o merendar, y del otro alimentos para almorzar o cenar. Sin embargo, todos estos alimentos parecen estar disponibles las 24 hs. Así que si te apetece almorzar a las 15 hs, pues adelante!
• Heladeras con diversas bebidas alcohólicas y sin alcohol.
• Máquinas de café y expendedoras de agua fría y caliente, con infusiones.

Si prefieres ver con tus propios ojos lo que vimos nosotros, aquí te dejo un video mostrando las características del VIP.

¿Volvería a usar el FastPass y el salón VIP de American Express en Ezeiza?

Es una respuesta compleja. Te daré mi punto de vista para cada uno, y en diferentes situaciones hipotéticas (todas podrían ser tu situación).

Situación A. Me parece super útil si piensas que llegarás al aeropuerto con el tiempo justo antes de que salga tu vuelo. Pero como es necesario reservar el servicio, no sirve si planificaste mal y simplemente “se te hizo tarde”. De todos modos puedes intentarlo reservando unos minutos antes.

Situación B. Si cuento con tiempo y sé que aunque use el beneficio tendré suficientes pases restantes para usar los beneficios otras veces en el año, lo usaría sin dudarlo para luego aprovechar ese tiempo en el VIP.

Situación C. Si llego con tiempo pero mi vuelo es en día/horario pico, lo usaría sin dudarlo un segundo.

Situación A. En horas pico me resulta un poco tedioso y lleno de gente. Tiene que sobrarme mucho tiempo entre mi llegada al aeropuerto y la partida de mi avión para que elija usarlo en esos momentos.

Situación B. Si viajo en horas tranquilas, con poca gente y dispongo de una hora o más tiempo para usarlo, lo usaría.

Situación C. Si no cené o no almorcé antes de volar, definitivamente lo usaría.

Situación D. Si necesito ducharme antes de viajar, lo usaría.

Situación E. Si lo que busco es dormir antes de viajar, porque me sobran unas cuantas horas, no lo usaría porque no tiene sitios cómodos para recostarse, y porque el tiempo máximo de permanencia es de 4 hs. Si tuviera una escala nocturna o varias horas de espera que quiero aprovechar para dormir, intentaría con las cápsulas/cabinas que se encuentran en el aeropuerto (que están pensadas para descansar, con camas). O intentaría dormir en los lugares comunes del aeropuerto, ya que no veo diferencias entre eso y el VIP en este sentido.

¿Cómo lo hicimos para ser unos novatos? ¿Lo hubieras hecho del mismo modo?

Por

Ale